Cientos de vecinos zarateños se volcaron masivamente a la ribera del Paraná de Las Palmas para tratar de menguar las altas temperaturas registradas durante todo el fin de semana.
Muchas familias con el mate, chicos jugando al fútbol, buscando refugio del sol debajo de un árbol y disfrutando de la brisa que corre en la orilla del río.
No obstante, sigue sin haber baños públicos apropiados para los cientos de vecinos que se acercan al lugar, el tránsito sigue siendo caótico y no hay controles de los puestos comerciales que cada vecino monta a su gusto sobre la avenida, representando un peligroso obstáculo para todos los transeúntes.
A su vez, los agentes de tránsito municipales brillaban por su ausencia, no había policías y solamente se encontraba una camioneta de la Dirección de Prevención Urbana circulando por el lugar.
“Masterplan”
Días atrás, el secretario de Obras y Servicios Públicos, Daniel Casadidio, reconoció que aún no se iniciaron todas las obras prometidas por el ministro de Planificación de la Nación, Julio De Vido porque no se depositó el dinero necesario para comenzar con las tareas.
Una de las obras programadas era la primera fase del “Master Plan” de la Costanera, denominado “Recuperemos la costa para todos” mediante el cual se pretende revalorizar y jerarquizar una de las zonas recreativas más deprimidas de la ciudad.
La primera fase de este plan integral consiste en 2.400 metros de tablestacado desde Rivadavia hasta la zona debajo del puente Zárate-Brazo Largo. Esto iba a aportar mayor seguridad a toda la zona para evitar que el río siga dragando la costa.
Hay una frase, en política a la que muchos echan mano para justificar su falta de ejecución, “los tiempos de la gente no son los tiempos de la política”.
Hoy el tiempo de la gente pide que se hagan arreglos en la costanera, que se instalen baños químicos y que se aporte infraestructura más allá del tablestacado.
El tiempo de la gente fue este fin de semana, pero es también el próximo y los venideros fines de semana de primavera y verano.
La juventud
Una gran cantidad de jóvenes se acercan todos los fines de semana a la costanera a pasar la tarde entre amigos o con sus parejas.
Con el nuevo decreto municipal sobre nocturnidad, todos se van a dormir temprano y el punto de encuentro, al otro día, es la costa.
Sin embargo, allí no hay nada para ellos, no hay actividades recreativas y deportivas ni tampoco existe una agenda cultural determinada que permita ser un complemento del mencionado decreto sobre nocturnidad.
Hoy la costanera sigue siendo un lugar “desaprovechado”, éste es el lamento que se encuentra en la mayoría de los vecinos que continúan asistiendo todos los fines de semana.
