Como parte de las postales que brinda la ciudad en distintos sectores, la acumulación de basura en la esquina de Conesa y Ameghino es permanente. Esto ha originado un reclamo constante de los vecinos para que se coloquen allí contenedores de residuos, al menos para que la basura no tapice el vecindario.
Mucho ya se ha hablado del tema y si bien es sabido el problema existente con la deficitaria prestación del servicio de recolección que no llega a determinados puntos de la ciudad por no estar incluidos en el contrato de concesión, en este caso se trata de un punto céntrico bien definido dentro de la prestación que realiza Cooperativa Eléctrica. Esto denota una clara falta de capacidad estatal para efectuar los controles debidos ya que no se realizan con la frecuencia y el rigor necesario para evitar estas circunstancias.
Los vecinos insisten con el reclamo por una cuestión principal, para que los que arrojan con desidia residuos en la vía pública puedan hacerlo en los contenedores y así evitar el desparramo de basura los días en los que el camión recolector decide no pasar.
Según manifestaron algunos de los residentes de la zona, quienes reconocen que parte de la situación se debe a su responsabilidad, esa esquina se transformó en un basural desde que dejaran depositado allí escombros. Eso generó lo que se denomina “efecto de terreno baldío” en el que la población arroja allí sus residuos porque lo ven un lugar propicio para hacerlo ante la falta de alguien que reclame por ello. No obstante, sostienen que el servicio de recolección no levanta toda la basura que debería y por eso se acumulan las bolsas.
