Otra jornada de intensa lluvia se vivió desde horas de la madrugada hasta primeras de la mañana de ayer en la ciudad y nuevamente se produjeron inconvenientes como anegamiento de calles y algunas viviendas.
En distintos barrios de Zárate las calles se inundaron y los vehículos hacían olas en cada esquina o rally en aquellas arterias aún sin pavimentar.
Las precipitaciones en el distrito comenzaron a registrarse alrededor de las 4.30 horas con normalidad. El sistema de desagües pluviales que, al principio descomprimía muy bien, comenzó a verse superado alrededor de las 5.30 cuando comenzó a incrementarse la cantidad de agua caída. El caudal de agua era cada vez mayor y alrededor de las 7 comenzaron a producirse los primeros problemas que, a diferencia de dos semanas atrás, no fueron muchos aunque igual de perjudiciales para quienes se encontraron con el agua en el interior de sus viviendas.
“Alrededor de las 7 se concentró mucha cantidad de agua y el sistema no permitía desagotar normalmente”, dijo tras ser consultado por el tema el subsecretario de Obras Públicas, Walter Salcedo. “Como se ha venido produciendo en los últimos días era mucha agua en poco tiempo”, agregó.
De acuerdo a lo informado por el funcionario, sin embargo, las obras de saneamiento y limpieza encaradas días atrás luego del primer gran temporal de diciembre, permitieron soportar más el impacto de las lluvias de ayer.
“Habíamos hecho algunas reparaciones y mejoras en distintos lugares que permitió que todo escurriera bien”, dijo y añadió que “en Villa Florida, Villa Angus y San Jacinto, donde habíamos tenido muchos problemas, esta vez no hubo inconvenientes”.
Aún así, San Jacinto todavía registraba algunas dificultades de descompresión en el zanjón de Avenida Antártida que habrían sido solucionadas. Barrio Saavedra también presentó algunos problemas aunque días atrás se había limpiado el zanjón principal.
Por otra parte, en La Ilusión el agua llegó al interior de algunas de las viviendas pero no hubo evacuados.
En el resto de la ciudad, según se indicó desde el Ejecutivo “quedaron algunas secuelas en las que estamos trabajando como en Pasaje Brasil y Pacheco donde hay un sumidero que siempre tiene residuos, lo que provoca que se tape todo, y en French y las calles 22 y 32 donde también hay bastante concentración de agua a diferencia de otras oportunidades en las que no había estancamiento y tenemos que ver por qué se produce ahora”.
Si bien alrededor de media mañana todo comenzó a descomprimir y alrededor del mediodía salió el sol, los funcionarios municipales junto a las cuadrillas de trabajo realizaron recorridas y tareas desde la madrugada para evitar que se vivan situaciones como las de días anteriores.
“No alcanzamos a descomprimir las viejas lluvias que se producen nuevas y más precipitaciones”, manifestó Salcedo, “tenemos el sistema medio saturado y no ayuda mucho el nivel del río, si fuera bajo permitiría que todo fluya mucho más rápido, estuvimos al límite en muchos lugares pero, más allá de alguna calle anegada, no hubo grandes complicaciones”.