Con una sala repleta de público, se presentó el sábado a la noche en el Forum Cultural, Osvaldo Bayer, gran figura de las letras, el periodismo y la cultura nacional. Bayer estuvo como parte del elenco del Cervantes que representó la obra “Las Putas de San Julián”, en un evento que se repitió el domingo, organizado por la Dirección de Cultura municipal.
En ese marco, Osvaldo Bayer se entrevistó con el intendente Osvaldo Cáffaro y, a sus 87 años, se hizo tiempo para charlar con la gente, sacarse fotos y dar cátedra sobre la importancia de los valores en estos tiempos complejos que nos tocan, con la autoridad de quien tiene sobre sus espaldas décadas de lucha y coherencia en defensa de la verdad histórica.
Por sus ideas, por sus investigaciones y su lucha por los derechos de los obreros, de los pueblos originarios y de la libertad de prensa, sufrió cárcel y persecuciones, como así también el exilio entre 1975 y 1983. Fundador junto a otros grandes de la prensa nacional del diario Página 12 y defensor de ideas anarquistas, Osvaldo Bayer se sube por primera vez a escena, convocado por el director Rubén Mosquera y el Teatro Nacional Cervantes para protagonizar “Las Putas de San Julián”, un episodio que quedó trunco en el final de la película “La Patagonia rebelde”, por prohibición de la dictadura militar.
“Las Putas de San Julián” transcurre en el prostíbulo “La Catalana” de San Julián, en Santa Cruz, en el año 1920 cuando se produce la fuerte represión militar contra los obreros rurales que organizaron la gran huelga impulsada por las primeras organizaciones sindicales, constituidas principalmente por inmigrantes polacos y judíos. Un episodio extraordinario por su valor fue casi ignorado por la historiografía y prohibido por los militares en la reconocida película de Héctor Olivera, “La Patagonia Rebelde” (cuyo guión corresponde a Bayer): Las “pupilas” de la casa se negaron atender a los soldados y oficiales del ejército porque no quisieron ser cómplices de los asesinos, demostrando una dignidad y una valentía que, a muchas, les costó la vida.
De ese episodio casi desconocido, Rubén Mosquera montó esta obra en la que Bayer es el protagonista principal. La obra en sí es una obra de arte, que cobra una gran emotividad por tratarse de un hecho histórico y se convierte en un gran homenaje al gran luchador que fue Osvaldo Bayer, a quien le debemos toda esa investigacion maravillosa que tanto dolor le costó a lo largo de su vida.
El público zarateño disfrutó plenamente de Osvaldo Bayer en persona, junto a un gran elenco de 12 actores maravillosos que dirigió Rubén Mosquera. Y Bayer disfrutó, dijo, como nunca había soñado a esta altura de su vida, del escenario del Forum, agradeciendo a quienes lo convocaron por la lucha constante y permanente que hoy “la democracia puede dar solamente a través de la difusión de valores culturales”.