Inicio Actualidad Solucionaron las obstrucciones del colector cloacal en Gallesio

Solucionaron las obstrucciones del colector cloacal en Gallesio

Autoridades de la empresa a cargo de la prestación de los servicios sanitarios en el distrito, Aguas de Zárate (AZSA), dieron a conocer ayer un informe sobre las tareas realizadas sobre el colector que corre por debajo de Avenida Gallesio en el que se produjeron serios inconvenientes que afectaron a todo el sistema. Aseguraron que el problema fue aliviado pero no garantizaron que no se presenten situaciones similares. Sin embargo, vieron con optimismo las obras que el Ejecutivo municipal encara con financiamiento nacional y provincial sobre la red.
Dos obstrucciones de importantes dimensiones, ocurridas entre los meses de abril y mayo, una a la altura de Mitre y otra a la altura de Rómulo Noya, produjeron una saturación del sistema cloacal que desencadenó el escurrimiento de efluentes a cielo abierto por el zanjón del ex ferrocarril Urquiza y otra serie de daños colaterales.
Según explicó el presidente del directorio de AZSA, Claudio Massarini, la cámara ubicada en la intersección de las calles Gallesio y Rómulo Noya, al poco tiempo de haberse producido la obstrucción de Mitre, sufrió un taponamiento de bloques de hormigón que se fueron desmoronando a raíz del saturamiento de efluentes cloacales que fueron produciendo su erosión debido al crecimiento vegetativo de la población y la falta de ampliación del colector.
“El colector de Gallesio fue construido para atender la zona de Villa Massoni, parte de Villa Angus, Brown, Ciriaco, una serie de barrios periféricos”, explicó Néstor Pagliari, otro de los directores de la empresa. “Pero con la extensión de los servicios fueron incorporados al mismo anillo otros barrios ubicados al otro lado de las vías del ferrocarril Mitre, Juana María, San Jacinto, eso hizo que hoy reciba un caudal de líquido superior al de su capacidad inicial”.

IMPORTANTE COLABORACION DE AYSA
En otro orden, Gustavo Giovane, otro de los integrantes del directorio de la empresa y encargado del área de operaciones, reconoció que ese tramo del colector presentaba una serie de problemáticas de vieja data a las que no se les había prestado la debida atención por falta de medios económico financieros para hacerlo. “Nunca se pudo actuar pero como la situación se hizo insostenible hubo que encararlo sí o sí”, manifestó.
En ese marco, se destacó la colaboración de AySA (Aguas y Saneamientos Argentinos). La compañía,  que presta los servicios esenciales de agua potable y desagües cloacales en la Ciudad de Buenos Aires y 17 partidos del primer cordón del Conurbano bonaerense, brindó soporte técnico y recursos humanos a la sociedad anónima zarateña sin recibir ningún tipo de retribución.
“En el caso de Pellegrini, el costo fue de 35 mil pesos”, informó Giovane, “pero podría haber sido más elevado si hubiésemos tenido que tener en cuenta todos los alquileres de equipos con los que AZSA  cuenta y sin los cuales no podríamos haber dado respuesta, todo podría haber ascendido a unos 65 mil pesos”.
Entre otros materiales, AySA aportó cámaras de video inspección con los que se pudieron realizar observaciones oculares para establecer el real diagnóstico de la situación con el objetivo de planificar la reparación de ese tramo del colector.
Por otra parte, recalcaron el trabajo de los empleados de la empresa de participación accionaria mayoritariamente municipal, quienes, a su vez, fueron presentados como los verdaderos protagonistas de la resolución de un inconveniente que había puesto en jaque el servicio cloacal de la ciudad.

MONITOREO CONSTANTE DEL SISTEMA
Las tareas fueron finalizadas en la segunda quincena de mayo, sin embargo las autoridades de AZSA prefirieron aguardar un mes antes de anunciar que el problema estaba solucionado, debido a la experiencia de Mitre donde ni bien se había dado respuesta en abril, un nuevo problema obligó a romper más de la cuenta la repavimentación que el Municipio había encarado pocos días antes.
Sin embargo, aunque se anunció la solución a este problema central de AZSA con optimismo y orgullo, los representantes de la empresa  no garantizaron el correcto funcionamiento del sistema.
“Es lo mismo que ir al médico”, dijo Massarini, “te pueden solucionar un problema y podés continuar con tu vida normalmente pero no te pueden asegurar que no te vuelva a pasar lo mismo o que te aparezca algo nuevo, la red de Zárate tiene 154 kilómetros de cañerías subterráneas y adolece de muchas cosas, se la trata de mantener y controlar en forma permanente, algo que no se hizo en su momento, ahora observamos un avance, ojalá que el comportamiento siga siendo el mismo”.
Por último, Pagliari hizo referencia a los importantes anuncios realizados por el intendente Osvaldo Cáffaro en relación a dar solución a éste, uno de los principales problemas del distrito. “Las obras que se van a encarar van a permitir alivianar la carga que tiene hoy el único colector de la ciudad”, dijo, “en la medida que determinados sectores tengan otras vías de desagüe, este colector va a ir viendo disminuida su carga y su funcionamiento va a ser mejor”.