No sólo la crisis económica hace bajar las persianas de los negocios, sino tambien las seguidillas de robos y asaltos de los que son víctimas. Testimonio de esto pueden dar los propietarios de una pañalera ubicada en Hipólito Yrigoyen al 800 que por tres veces consecutivas en menos de un año fueron víctima de robo en el que se le sustrajeron mercaderías. El último fue hace unos días cuando entró al comercio un joven que armado intimó a la dueña para llevarse todo lo que pudo. Unos días antes habían ingresado con el local cerrado y entre otras cosas, se alzaron con todo el gel alcohólico que tenía para la venta. Desalentados por estos robos que no le permiten reponerse, dijeron en el negocio, que la única salida es cerrarlo.