Cientos de adolescentes zarateños siguen con su particular hábito de encontrarse en la calle 19 de Marzo, sentarse en los umbrales de los negocios y las viviendas y charlar entre amigos durante horas.
Son jóvenes de entre 14 y 17 años que se reúnen con sus celulares, con sus reproductores de mp3 y mp4 y disfrutando del encuentro con amigos que vienen y se van.
“Vengo porque me gusta, antes de estar en casa con un par de amigas vengo acá y las puedo ver a todas las chicas del curso. Nos mandamos mensajes para ver dónde estamos y nos sentamos siempre en la misma vereda”, comentaba Lucía, alumna del Colegio Hotton. “Yo me bajo videos graciosos al celular y luego vengo y se los muestro a mis amigos y nos reímos todos juntos. Cada día traigo uno diferente. Además, nos gusta ver a los bikers que hacen saltos en la vereda”, destacó Camilo, un adolescente de 16 años que siempre se junta con sus amigos en la esquina de Independencia y 19 de marzo.
La mayoría de los chicos se encuentra pasadas las 20 horas, una cita que se extiende hasta las 22; cuando vuelven a sus hogares a cenar en familia.
Tradicionalmente, la calle Justa Lima fue la cita obligada de esta juventud zarateña para juntarse y “pasar el rato”.
Como en toda “ciudad grande” del interior de la provincia, los jóvenes realizan una cotidiana “vuelta al centro” para salir del entorno hogareño y juntarse con compañeros del colegio o amigos.
En esta época veraniega aún más se asentó este hábito y muchos adolescentes salen a tomar aire fresco tras las agobiantes jornadas de la pasada semana.
El nuevo escenario de los chicos, que antes lo hacían en la esquina de Justa Lima y Rómulo Noya, ahora es la calle 19 de Marzo.
“La calle Justa Lima sigue siendo una calle para gente más grande y los fines de semana hay peatonal, pero la calle 19 de Marzo es más tranquila. No está llena de bares y nos podemos sentar en la vereda. No queremos tomar nada, solamente pasar el rato, charlar y estar con nuestros amigos”, expresó Daniel, de 16 años.
Todos reconocieron que esta nueva moda se fundó “por contagio” y que nuevos chicos deciden reunirse en esta calle “porque otros comenzaron a ir”, aunque nadie arriesgó a decir qué sucede con los que dejaron de ir.
“Creo que todos dejan de venir cuando terminan el secundario y se van a estudiar a Capital o a otros lugares. Algunos que nos quedamos en Zárate y estudiamos en Campana seguimos viniendo. También pasa que se ponen de novio y ya no vienen más. De mi curso muy pocos seguimos viniendo luego de terminar el secundario”, reveló Matías, de 19 años.
Más allá de la estética que todos cuidan, la ropa y los peinados; los dispositivos tecnológicos, como celulares y mp4, el hábito de sociabilizarse y charlar con otra gente continúa. Quizás sea molesto para los peatones que transitan por la calle 19 de Marzo caminar con tanta gente parada en la vereda o ingresar a algún comercio con chicos sentados en el umbral pero es un “hábito social” que continúa, una tradición juvenil que se mantiene a pesar de lo rápido y efímero que pueden presentarse las relaciones en la adolescencia.
“Siempre arreglamos por chat vernos en la esquina de Noya y 19 de marzo. Terminamos de arreglar todo por mensajes de texto. Después nos vemos, charlamos y nos vamos, aunque después seguimos hablando por MSN. Mañana seguramente haremos lo mismo, es una costumbre que nos gusta mucho”, concluyó Lucía; sus amigas la abrazaban mientras asentían con la cabeza.