Alumnos del centro de extensión Zárate de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (UNLZ) participarán, los días 9 y 10 de octubre, de un ejercicio de simulación de las deliberaciones del Consejo Permanente y de las sesiones ordinarias de la Asamblea General de la OEA (Organización de los Estados Americanos) que se llevará a cabo en la sede central de la institución educativa.
Se trata de un proyecto que se realiza anualmente y en el que los grupos de estudiantes representan a alguno de los 34 países miembros del organismo internacional para discutir en las comisiones de la OEA asuntos de actualidad regional, siguiendo estrictamente las reglas de procedimiento y códigos de conducta, aplicando lo aprendido de materia de derecho internacional, realidad social, entre otros.
“Esto está orientado a hacer una simulación de una asamblea de la OEA, en la que se ponen a discusión temas y propuestas de resolución de problemas”, informó la directora del IRINI (Instituto de Relaciones Internacionales y de Integración), Teresa Manera. “Cada grupo de estudiantes representa a un país, cada delegación está integrada por cuatro estudiantes, en este caso Zárate llevará a ocho porque representa a dos estados: Uruguay y Nicaragua”, agregó.
Las delegaciones, conformadas por los alumnos Alberto Sánchez, Matías Ballestrini, Alcira Marconi, María del Carmen González, Sergio Riolfo, Carina Acro, Miriam Duran y Gabriela Soria García, van acompañadas por el profesor Gustavo Lenguitti, egresado del centro de extensión Zárate, junto al coordinador, Martín Lombardo.
Como espacio de investigación y debate, es el IRINI el que asigna los países representados por los alumnos de los distintos centros de extensión quienes deben tener un conocimiento adecuado de las funciones y los documentos básicos de la OEA, así como de las reglas e instrucciones del ejercicio de simulación, las cuales se observan incluso por miembros del organismo internacional.
Los estudiantes preparan propuestas de resoluciones siguiendo las instrucciones para la redacción de las mismas y para las cuales deben conseguir apoyo de otras delegaciones participantes. Asimismo, los delegados tienen que defender sus resoluciones durante el debate correspondiente en cada una de sus comisiones.
“Los delegados asumen plenamente la representación del país”, explicó Manera, “se supone un conocimiento y formación en lo que hace a la realidad de cada país, esto ayuda a avanzar en lo que significa el conocimiento sobre distintos países, el funcionamiento total de la OEA, documentos, resoluciones adoptadas por ese organismo, todo para actuar en consonancia”.
El criterio de selección de los alumnos para participar de un evento de estas características, lo explicó Lombardo, quien participó de un ejercicio similar desarrollado en Chile. “Es en base al rendimiento académico y la disponibilidad, no todos tenían la posibilidad de viajar en esa fecha, de realizar un trabajo comprometido paralelo al estudio o su labor particular”, señalo. “Como ejercicio es mucho lo que se aprende”, agregó desde su experiencia, “no sólo en lo académico sino en las relaciones humanas, en la vida en general porque es una experiencia de mucha gente con realidades distintas en las que se ven muchas coincidencias y diferencias con las cuales crecer”.
Dado que este modelo de asamblea de la OEA es asesorado técnicamente y observado por miembros del organismo, el enriquecimiento es mutuo ya que muchos planteos de alumnos son tenidos en cuenta. “En Chile, el secretario general de la OEA estuvo presente y tuvo una intervención en la que manifestó en qué medida todos los proyectos que se analizan en la simulación de asamblea pueden resultar material interesante para la entidad en sí”, informó Manera, “algunos proyectos en concreto se llevan al seno de la organización”.
Por su parte, los alumnos, le indicaron a LA VOZ cómo fue el proceso de preparación para lo que serán las jornadas en Lomas de Zamora. “Primero nos interiorizamos sobre el país que nos tocó representar”, indicó Carina Acro, “desde ubicarlo geográficamente hasta tomar conocimiento de su realidad en todos los sentidos y sin filtros, no es fácil porque para representar a otros países hay que ponerse en la piel de su gente y desde ahí buscar apoyo de otros países para resolver los problemas”.
Alberto Sánchez, será representante de Uruguay e hizo referencia al conflicto medioambiental que mantiene con la Argentina, las papeleras sobre la costa de un río que comparten mutuamente, y la forma en la que ello puede llegar a condicionar el trabajo que ha realizado. “Tenemos que ponernos en el papel de uruguayos y defender el tema de las papeleras, nos va a costar pero nos hemos interiorizado en el tema y tenemos que hacerlo porque ése es el país que vamos a representar, uno tiene que tener elementos como para defender este tipo de criterios que otros pueden tener en contra”.
Por último, el director del centro de extensión Zárate, Pablo Vellani, dijo que “apoyamos la participación de los alumnos en este tipo de certámenes porque es una forma de poder medir su preparación”, destacando la labor de otros alumnos que recibieron reconocimiento en todos los niveles.