El Comité Zonal de Seguridad e Higiene de Zárate y Campana desarrolló ayer en la mañana el simulacro de emergencia con materiales peligrosos en la rotonda de acceso a esta ciudad. El ejercicio contempló la colisión hipotética de dos camiones cargados con amoníaco y nafta, que simularon impactar en el cruce de las rutas 12 y 6. En él actuaron Bomberos Voluntarios de ambas localidades, Gendarmería, Policía, DPU (Dirección de Prevención Urbana municipal), SEMZAR y las industrias de la zona.
“Fue muy positivo”, dijo el jefe del Cuerpo Activo de Bomberos de Zárate, Claudio García, sobre el resultado del simulacro, “se trabajó en conjunto con todas las fuerzas vivas e industrias de la zona, se cumplieron con todas las expectativas, fue un éxito”.
La situación requirió, en primera instancia, de las respuestas iniciales de la Policia Vial ubicada en la zona del desastre, el escuadrón Zárate-Brazo Largo de Gendarmería y de Bomberos Zárate. “La comunicación de los distintos grupos fue acorde a lo planeado, Bomberos Voluntarios de Zárate tiene una base de comunicación con todas las industrias y se dio inmediato aviso poniendo en alerta al PACEI (Plan de Alerta Comunitario ante Emergencias Industriales) quien automáticamente ordenó que bajara el resto de los organismos”.
Tras el desarrollo de las primeras actuaciones, se estableció el Comité de Operaciones Especiales (COE), con la inmediata incorporación del propio PACEI, de la Brigada de Seguridad de la compañía Monsanto ya que se determinó que el transporte de amoníaco se dirigía a esa unidad industrial, la coordinación local de Defensa Civil y se solicitó el apoyo táctico de los Bomberos Voluntarios de Campana y los servicios de urgencias médicas que presta SEMZAR.
“No se tomaron tiempos porque en esto siempre se trata de establecer errores y tratar de solucionarlos para mejorar la operatividad”, señaló García.
El objetivo principal era poner en práctica el plan de respuesta ante emergencias en la vía pública con presencia de material peligroso, evaluar su efectividad, verificar la comunicación entre los grupos actuantes y poner a prueba los equipos y materiales para el control de este tipo de emergencias. En cuanto a las cosas que se observaron como para mejorar a fin de reforzar el sistema de respuesta, García dijo que “hay que mejorar problemas de coordinación en el momento de llegada al accidente pero fue todo prácticamente de acuerdo lo estipulado, fueron muy pequeñas las cosas que limar”.
Una vez finalizada la actividad, sus integrantes evaluaron los resultados de la práctica en las instalaciones de Monsanto y anunciaron la realización de un nuevo simulacro que tendrá lugar en Campana en diciembre con características similares.