En cada aniversario de su asunción, o sea en las fechas cercanas a los 10 de cada mes, el intendente convoca a la prensa para hacer un repaso de su gestión, en los ejes más importantes.
En este caso, retomó los tres pilares de su campaña, obras públicas, seguridad y salud territorial; subrayando que todas se están haciendo con fondos propios.
Fundamentalmente arrancó por su “caballito de batalla”: el arreglo de calles. El bacheo con hormigón y asfalto que tendrá varias etapas y llegará a las principales calles de la ciudad.
Luego, anunció un plan general de mantenimiento y remodelación de las plazas públicas de la ciudad las cuales, a la luz de todos, “están muy deterioradas”.
“Lo fundamental son las calles, el agua y los espacios públicos, que le tenemos que dar el mantenimiento que no tenían las luminarias. Estamos empezando a definir cuáles serán las obras para el año que viene, que van a tener la misma lógica de recuperación de las calles y del espacio público, que van a llevar dos años. Así que el año que viene será bastante parecido a este, lo único que ya vamos a incluir es el tema de veredas”, comenzó explicando el intendente en una larga entrevista de media hora.
El tema de las veredas es uno de los grandes problemas de la ciudad que siempre queda a la cola de las necesidades y las obras prioritarias. Será tema de profundización más adelante.
“Estamos promediando un 70% de lo que es el Plan N°1 de Bacheo de Hormigón y un poco más avanzado en el de asfalto. Vamos a llamar a licitación dentro de 30 días aproximadamente para el Plan de Bacheo de Hormigón Etapa 2. También con el Plan de Bacheo en Lima, que es la misma licitación de Zárate que se está extendiendo hacia allá”, confirmó el jefe comunal.
A la par de las obras de mejoramiento en la vía pública, una necesidad básica y prioritaria; el intendente habló de la necesidad de mejorar las plazas como espacios públicos.
Otro de los ejes que trató es la seguridad que, a la par de las obras públicas encaradas está relegada. Es decir, la inseguridad continúa y los hechos son moneda corriente, con lo cual existe una continuidad respecto a la gestión anterior.
“Tenemos la concepción de que la seguridad no es solamente poner patrulleros y personal, por eso creemos que es fundamental que recuperemos la tranquilidad de nuestros espacios públicos. Vamos a encarar un reemplazo de luminarias en la Av. Lavalle por luces led, y las que sacamos para iluminar zonas oscuras. También vamos a empezar la recuperación de todas las luminarias del Parque Urbano, que hay muchas quejas justificadas de vecinos y es porque se han robado los tableros y los cables. Tenemos que volver a hacer inversión en esos lugares para recuperar las luminarias, que sean lugares más seguros desde lo visible. Después estamos trabajando también en Paradas Seguras para la gente que va a trabajar al Parque Industrial, iluminar la bicisenda que va hasta la Terminal Portuaria”, agregó.
Respecto a este tema no habló sobre el programa “Ojos en Alerta” que no se está aplicando o la coordinación del COZ con las fuerzas de seguridad, ya que falta más patrullaje en distintas zonas de la ciudad. Y aquí es donde existe un “cuello de botella” con el recurso humano y con la capacitación de esos recursos humanos.
“Hoy la seguridad tiene dos puntos a resolver. Uno va en camino y el otro se hace un poco difícil. El primero es aumentar la zona de videovigilancia vamos en camino, y el segundo es, tener más gente en la calle. Necesitamos policías retirados de fuerzas de seguridad o adicionales de la policía. Los adicionales de la policía al día de hoy no están autorizados por la Provincia de Buenos Aires, no los podemos poner en un móvil, y cuando hacemos la convocatoria no recibimos la cantidad que nosotros necesitamos como nos pasa en otras áreas, por ejemplo, pediatría. Tenemos que seguir trabajando en eso, pero somos conscientes de que aportamos patrulleros, estamos mejorando de a poco las cámaras, estamos con la poda de los árboles para mejorar la iluminación, queremos recuperar la iluminación de espacios públicos, nos falta el recurso humano, es lo más difícil de conseguir, pero hay que seguir insistiendo”, reconoció Matzkin.