Semanas atrás el Ejecutivo Municipal elevó el Presupuesto Municipal para el período 2023, junto con la reforma fiscal e impositiva que contempla un aumento de tasas del 161%, en el marco de un presupuesto de 13.800 millones de pesos. En ese marco, se llevaron a cabo hasta el momento tres reuniones de funcionarios del Ejecutivo y concejales, a las que asistieron la Secretaria de Hacienda, Patricia Fernández y el Secretario de Gobierno, Juan Manuel Arroquigaray, sumado a un tercer encuentro del que solo participaron ediles oficialistas y de la oposición, a los fines de trasladar los argumentos del proyecto y abrir la instancia de debate.
A sabiendas de la dinámica que presenta la discusión política en el ámbito legislativo, con una composición muy heterogénea, desde el Ejecutivo contemplaban la posibilidad de resistencias al acompañamiento del proyecto; aún así, los procesos de discusión no se dieron como esperaban y los puntos de acuerdo parecen cada vez más lejanos.
“Se subió un presupuesto inicial con una posibilidad de aumento en la parte impositiva en dos partes. En el presupuesto vamos a definir lo que va a ser gastado, utilizado durante el año próximo. Y la Impositiva es justamente lo que va a soportar parte de ese presupuesto”, explicó el concejal Ariel Ríos en diálogo con LA VOZ y continuó: “Hoy no tenemos definición de parte de los bloques de la oposición respecto de una visión del presupuesto que, en un marco normal institucional, debería ser respetado porque es la herramienta que tienen los ejecutivos, el de acá, el de Campana, el de Gobernación y Nación para gobernar en el año”.
En los últimos días, desde la oposición direccionaron su propuesta en un sentido concreto: derogar las sobretasas en concepto de Salud, Deporte y Educación.
“Hay mucho de mito respecto de las sobretasas. Hablar de sobretasas es hablar de todo lo que es la parte cultural, la parte deportiva, la parte de salud que podemos soportar y podemos dar servicios que justamente están por mejorarse. Pero sin esa sobretasa sería muy dificultoso llevarlo adelante en un presupuesto que estamos duplicando, y eso merece también una entrada de fondos que acompañen ese presupuesto”, señaló Ríos. Al respecto, el concejal puntualizó que, si bien el proyecto elevado por el Ejecutivo impulsaba un aumento del 161%, “se pasaron varias etapas y hoy no sería lo que el Ejecutivo estaría planteando como necesario”.
En esa línea, amplió: “Se estaría planteando un escenario un poco más bajo, entendiendo el pedido de la oposición. Pero justamente creo que hay una intención de la oposición de que eso sea casi inviable, porque están presentando una situación de un módulo de los cuales no cubriría ninguna de las expectativas”. Esto tiene que ver con que, según indicó el edil, el aumento de tasas que aceptaría la oposición rondaría el 105%.
“Nosotros entendemos la situación económica actual, entendemos la situación de los vecinos, no vivimos en otro país, pero la realidad es que creemos que hay una intención de la oposición de no contar con los fondos para poder asistir a los servicios básicos”, remarcó. Del mismo modo, puntualizó que el presupuesto elevado contempla no solo el pago de sueldos y recolección de residuos, sino también “la posibilidad de seguir construyendo, invirtiendo en integración comunitaria, deporte, salud, educación y eso no se podría con lo que lo está ofreciendo la oposición. Hay una doble vara y una contradicción, porque nos piden más servicios, pero no nos dan las herramientas para cumplir ese servicio. Y eso es lo que el vecino debería saber. Esperamos que prime la razonabilidad, la responsabilidad institucional y política, porque me parece que no se hace un mal al Intendente, se le hace un mal al vecino”.
Desde una lectura política, Ríos manifestó que este endurecimiento de las posiciones en el marco de un debate tiene que ver con la proximidad de un año electoral”. Asimismo, puntualizó en la necesidad de “buscar los medios en este tema” y que, si bien esperaban objeciones, también instan a la oposición a que ofrezcan “propuestas razonables”.