El presidente del bloque la Libertad Avanza en la Cámara de Diputados de la Nación, Oscar Zago, anticipó que buscarán avanzar nuevamente con el plan de privatizaciones de empresas del Estado que incluía la frustrada Ley Ómnibus durante el período de sesiones ordinarias del Congreso.
“Ahora que empiezan las sesiones ordinarias, se va a empezar a discutir no solo el tema del DNU, también otras cuestiones. Las privatizaciones entrarán dentro de esa discusión. De ser así, la privatización del Banco Nación, va a ser por ley”, declaró.
El diputado oficialista recordó que en el proyecto del Gobierno había más de 40 compañías del Estado a ser privatizadas. El número bajó a 21 luego de las negociaciones con los bloques dialoguistas. Ahora volverán a intentar aprobar la privatización del Banco Nación y la de otras firmas que ya se daban por perdidas”, especificó.
Asimismo, el diputado libertario fue consultado sobre la posibilidad de volver a discutir en el corto plazo la Ley Ómnibus. “Eso lo decidirá el Poder Ejecutivo, se pueden trabajar los 664 artículos, donde ya hay un análisis realizado, un trabajo previo”.
Estas declaraciones de Zago se dan en el marco del pedido del bloque de diputados oficialistas de una reunión con Javier Milei para redefinir la estrategia política y legislativa de cara al inicio de sesiones ordinarias del 1 de marzo próximo.
PRIVATIZACION PARCIAL DE NUCLEOELECTRICA ARGENTINA
Antes de caer el tratamiento y votación en el Congreso, las modificaciones introducidas en la ley ómnibus establecían un cambio fundamental en materia de empresas públicas.
Finalmente, se planteaba que la compañía Nucleoeléctrica S.A., operadoras de las centrales nucleares Atucha I, Atucha II y Embalse, deberá seguir bajo control estatal. En el proyecto inicial de Javier Milei, era una de las 41 que estaba como “sujeta a privatización”, lo cual había generado cuestionamientos de legisladores tanto de Unión por la Patria como de Juntos por el Cambio, e incluso de Rafael Grossi, el argentino que es reconocido en todo el mundo por ser uno de los mayores expertos globales en materia nuclear.
En el capítulo sobre privatización, está la información que define que Nucleoeléctrica S.A. seguirá siendo operada por el Estado.
Así, el documento dice: “Se eliminó YPF del listado. Para Nucleoeléctrica, Banco Nación y ARSAT se estableció que el Estado solamente puede realizar una privatización parcial, debiendo mantener el control de la empresa. Además, se incorporó expresamente, la participación de la Comisión Bicameral de Privatizaciones de la Ley N 23.696 para el seguimiento de los trámites respectivos”.
De esta manera, sólo se habilitará una “privatización parcial” de la compañía. Actualmente, el capital accionario de Nucleoeléctrica se encuentra distribuido en 79% el Ministerio de Economía, 20% la Comisión nacional de energía atómica y 1% Energía Argentina.
La importancia de la empresa radica en que opera las centrales Atucha I, Atucha II y Embalse, lo que representa el 7% del total de la matriz eléctrica de Argentina. Además, entre sus desarrollos tecnológicos, Nucleoeléctrica es contratista de Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) en la construcción del proyecto CAREM, que funcionará como una “mini central nuclear”.
El reactor tiene una tecnología que solo realizan 3 países y que podría exportarse por cifras millonarias, en un contexto donde la transición energética favorece a la energía nuclear, que no genera dióxido de carbono.